Por un año nuevo con PROPÓSITO

Paraa que tus propósitos de año nuevo no se conviertan en una carga, te doy algunas sugerencias para trabajarlos.

Escrito por: Tere Díaz

Tiempo de lectura: 4 minutos

 

¿Propósitos o despropósitos de Año Nuevo?

 

Constantemente escuchamos a personas que, con orgullo y hasta cierta arrogancia, comentan que ellos no celebran ninguna fiesta del calendario. Tal vez  su posición no sea terrible ni reprochable, pero no es la única perspectiva posible. Si bien, algunas celebraciones podrán no agradarnos, la realidad es que algunas otras tienen un valor que muchas veces no notamos: los rituales y las celebraciones tienen su importancia pues nos ayudan a cerrar ciclos e iniciar nuevas etapas en la vida. Quizás, de manera particular, comenzar un nuevo año produce un deseo de renovación y nos genera un ímpetu de cambio.

Pero, generalmente, las “buenas intenciones” en enero -de ser mejores personas, lograr metas postergadas,  provocar encuentros temidos,  conquistar territorios inexplorados–  inician siendo anhelados deseos, para convertirse  en intentos postergados en marzo, y así llegar a julio viviéndolos como pendientes inconclusos (y con picor en la conciencia), hasta que en octubre son intentos fallidos y en diciembre están cargados de frustración por no haberlos logrado.

propósitos de año nuevo

El cambio es un proceso y no un evento

 

Por eso es importante que entiendas que el cambio es un proceso y no un evento. Son las acciones sencillas y sostenidas en el tiempo las que nos permiten, de a poco, aumentar el grado de complejidad de la mismas y nos llevan conquistar territorios inexplorados. Un cambio de rutinas, o de vida en general, es muy similar a ser un corredor principiante: no comienzas realizando un maratón (cosa que, por cierto, puede matar a un amateur ), sino caminando un par de horas, trotando, corriendo algunos kilómetros en un parque cercano y, con el tiempo, te permites superar tus primeros límites.

propósitos de año nuevo

Este año nuevo

Trata de romper esquemas, de cuestionar las rutinas, de ser poco a poco alguien nuevo, mejor. Crecer personalmente es una tarea larga pero placentera. Mirar atrás y dar cuenta de cuánto hemos avanzado es siempre un aliciente, descubrirnos nuevos y mejores es el obsequio por el esfuerzo. Busca los pequeños cambios que te sean útiles en este camino. Es más, de ser el caso, date el gusto de comer despacio aquellas doce uvas, no las cargues con deseos como velas de pastel. Genera el cambio poco a poco y verás que los propósitos no son cosa de magia, pero al percibir que avanzas favorablemente en tu camino de vida, experimentarás una sensación que no será menos que mágica.

 

“No te sientes a esperar a que lleguen las oportunidades, sal a buscarlas.”

(Visited 1.025 times, 1 visits today)